Helle Heckmann, experta danesa, cree que el éxito educacional de los países nórdicos pasa por una formación preescolar que enfatiza las habilidades sociales sobre las intelectuales.
Chile se ha convertido en una prioridad para Helle Heckmann. Pese a la distancia con su natal Dinamarca, esta especialista en educación preescolar dice sentirse "muy cómoda" en el país, pues "sus niños son muy creativos, de mucho potencial".Por eso quiere traer con fuerza al país el sistema pedagógico Waldorf, que se basa en la imitación de actividades por parte de los niños, siempre en contacto con la naturaleza. No por nada lleva 20 años a la cabeza del jardín infantil Nokken, en Copenhague, uno de los referentes mundiales de este método.Ya ha sostenido reuniones con la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) y con la Fundación Integra. El plan es, a corto plazo, instalar un centro de entrenamiento para educadores de párvulos. "Hasta tengo visto el edificio", cuenta.-¿Qué aspectos diferencian a los sistemas educativos de Chile y Dinamarca?"En general, en los países escandinavos se retrasa al máximo la entrada a la básica, lo que ha generado que nuestros niños obtengan altos puntajes en las pruebas internacionales. Se entiende la necesidad de una educación preescolar larga, sin apurar procesos. Lamentablemente, esa visión está cambiando".-¿Por qué?"Es una tendencia mundial que no pasa por aspectos pedagógicos, sino financieros. Es más barato tener a los niños en la escuela que en el kinder. Pero la evidencia muestra que los niños que están más tiempo en el preescolar entienden más rápido que los demás en el colegio".-¿Qué habilidades se deben formar en la etapa preescolar?"Competencias sociales, como entender instrucciones y ayudar a los otros. No necesitan nada académico, eso lo obtendrán después: todo el mundo aprende cuando está listo para hacerlo. A un niño que va al colegio desde los 5 años se le mata la creatividad. Justo cuando más se necesita gente creativa".-¿Qué opina del plan del país de aumentar la cobertura de la formación en este nivel?"Es importante, pues es deber del Estado darle soluciones a las madres que trabajan. Pero es igual de importante enfatizar la necesidad de entrenamiento y capacitaciones de quienes estarán educando a esos niños".-¿Ese debiera ser el foco de un futuro sistema de acreditación de los jardines infantiles?"Sí. Tienen que manejar habilidades esenciales. Deben evitar sobreexigir a los niños o pedirles menos de lo que necesitan. Deben tener un método que ayude al niño a ayudarse a sí mismo, desarrollando su autoestima.Si a uno le preguntan cómo fue su infancia, recuerda olores, sensaciones. Todo lo que fue dicho a la cabeza, queda fuera. Por eso en el kínder se educa con el corazón, no con la cabeza. Es la gran diferencia respecto de cómo enseñan acá".
Chile se ha convertido en una prioridad para Helle Heckmann. Pese a la distancia con su natal Dinamarca, esta especialista en educación preescolar dice sentirse "muy cómoda" en el país, pues "sus niños son muy creativos, de mucho potencial".Por eso quiere traer con fuerza al país el sistema pedagógico Waldorf, que se basa en la imitación de actividades por parte de los niños, siempre en contacto con la naturaleza. No por nada lleva 20 años a la cabeza del jardín infantil Nokken, en Copenhague, uno de los referentes mundiales de este método.Ya ha sostenido reuniones con la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) y con la Fundación Integra. El plan es, a corto plazo, instalar un centro de entrenamiento para educadores de párvulos. "Hasta tengo visto el edificio", cuenta.-¿Qué aspectos diferencian a los sistemas educativos de Chile y Dinamarca?"En general, en los países escandinavos se retrasa al máximo la entrada a la básica, lo que ha generado que nuestros niños obtengan altos puntajes en las pruebas internacionales. Se entiende la necesidad de una educación preescolar larga, sin apurar procesos. Lamentablemente, esa visión está cambiando".-¿Por qué?"Es una tendencia mundial que no pasa por aspectos pedagógicos, sino financieros. Es más barato tener a los niños en la escuela que en el kinder. Pero la evidencia muestra que los niños que están más tiempo en el preescolar entienden más rápido que los demás en el colegio".-¿Qué habilidades se deben formar en la etapa preescolar?"Competencias sociales, como entender instrucciones y ayudar a los otros. No necesitan nada académico, eso lo obtendrán después: todo el mundo aprende cuando está listo para hacerlo. A un niño que va al colegio desde los 5 años se le mata la creatividad. Justo cuando más se necesita gente creativa".-¿Qué opina del plan del país de aumentar la cobertura de la formación en este nivel?"Es importante, pues es deber del Estado darle soluciones a las madres que trabajan. Pero es igual de importante enfatizar la necesidad de entrenamiento y capacitaciones de quienes estarán educando a esos niños".-¿Ese debiera ser el foco de un futuro sistema de acreditación de los jardines infantiles?"Sí. Tienen que manejar habilidades esenciales. Deben evitar sobreexigir a los niños o pedirles menos de lo que necesitan. Deben tener un método que ayude al niño a ayudarse a sí mismo, desarrollando su autoestima.Si a uno le preguntan cómo fue su infancia, recuerda olores, sensaciones. Todo lo que fue dicho a la cabeza, queda fuera. Por eso en el kínder se educa con el corazón, no con la cabeza. Es la gran diferencia respecto de cómo enseñan acá".
HELLE HECKMANN Experta danesa en educación preescolar y metodología Waldorf. Es autora de varios libros sobre el tema.
